Nadie

Quien sabe cual es el castigo que corrompe a los hombres, que los hace ser lo que son, quien sabe cual será su penitencia por ser tan bellos de labios rojos y profundos y ojos grandes expresivos, piel tersa pálida y nariz tallada finamente. No entienden la razón de tenerlo todo de jugar con ello de presumirlo  y mostralo a los demás, no entienden de que no es suficiente, no entienden que  eso no los hará mirar a los ojos, nadie mirara por ellos. Solo saben de lo que carecen de lo que necesitan y de lo nadie les puede dar, de que todos los admiran pero que nadie los puede amar como se acostumbra amar en estos tiempos. de que nadie les dirá los mismo de que nadie hablara por ellos ni los mirara sus ojos. de que se quedaran por la eternidad bellos y hermosos sin ser vistos. que tan grande castigo el que me han dado. nadie hablara por mi.